Un Spa mental

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¿Estás seguro que tu definición del exito no te está deteniendo?

Usualmente asociamos el verano con la temporada de vacaciones, de pasar tiempo libre y consentirnos un poco. Te invito a transportarte a un lugar paradisíaco. Frente al mar, debajo de una palmera; a la orilla de un caudaloso río o si gustas practicar deportes extremos explorando el cráter de un volcán. Déjate llevar y despeja tu mente… te propongo ¡darte un Spa mental!

Comencemos…

Al llegar al Spa te despojas de tus ropas, te envuelves en una cómoda bata (kimono) y así inicias un viaje de relajación y recuperación. Despójate de esos pensamientos que te atormentan, expulsa rencillas y resentimientos de tu mente. Perdona, para que puedas comenzar tu viaje a una vida más plena.

Exfolia tu mente de patrones mentales derrotistas o negativos, no te dejes influenciar con las “aves de mal agüero” que se pasan la vida vaticinando catástrofes; no te contagies con su negatividad. En períodos de crisis muchos se dedican a esparcir incertidumbre y su conversación no aporta a tu bienestar. Si has intentado mostrarles una manera diferente de enfrentar los retos cotidianos y ellos persisten en su estilo… Respira y aléjalos de ti.

Masajes e hidromasajes

Continúa con tu día de Spa, aplicándote una envoltura corporal. Podrás escoger la que mejor te aplique según el efecto que quieras lograr: almendras y coco para confrontar tus miedos, chocolate para sanar en el amor, aceites esenciales para ser más tolerante o algas para desintoxicarte. Ningún Spa te aplicará este tratamiento a la carrera, invierten tiempo al aplicarlo, a que tu cuerpo lo reciba y surja efecto. Dedica tiempo a evaluar, a analizar esas áreas que no están funcionando (carácter, tolerancia, etc.) y así estarás lista para el próximo paso.

Utiliza el valor del agua, su frescura, su limpieza… Disfruta de los baños termales, el agua caliente abre los poros, salen las toxinas e impurezas… Sumérgete y limpia tu corazón. Libéralo de tantas ataduras: recelo, resentimiento, esperar siempre lo peor y no confiar en el otro ser humano, miedo a amar y ser amado… Este proceso es lento, un solo baño no será suficiente para algunas condiciones, pero eventualmente traerá beneficios a la salud.

Todavía quedan muchos tratamientos. Puedes escoger entre: peeling, reflexología, tratamientos faciales, depilación y otros. Escoge los que necesites para completar tu tratamiento, ten paciencia, recuerda que como en el Spa, tal vez una sola visita no sea suficiente.

Esperamos que hayas disfrutado. El Spa no es un ejercicio de visualización, sino una invitación a seriamente escoger los pensamientos que dejamos alojarse en nuestra mente, porque estos afectan nuestro estado de ánimo. La mente es poderosa y si se lo permitimos puede llegar a controlarnos. Si piensas cosas tristes terminarás sintiéndote triste. Relájate, respira profundo y ¡renuévate!